miércoles, 11 de julio de 2012

INTOCABLE






A veces, pocas veces, una película es capaz de conmoverme de tal forma que vuelve la sensación de estar vivo como una caricia cuyo escalofrío olvido con más frecuencia de la que desearía.
 Untouchable (Intocable) es la historia de la asunción del riesgo de estar vivo cuando ya estás condenado a la rutina de los cementerios, del riesgo de aceptar, conocer y querer al diferente, del riesgo a ser rechazado cuando te enamoras, del riesgo a jugarte tu última oportunidad cuando has aceptado que ya no hay futuro.
Untouchable es el encuentro de dos universos humanos separados por una insondable e insalvable  fisura social; pero justo en el vórtice del prejuicio es cuando ellos deciden arriesgar en una apuesta sin ninguna garantía , se arriesgan a conocerse sin condiciones, a reírse con el otro, a llorar o a enloquecer, en fin, se arriesgan a vivir.
El contrapunto narrativo de esos dos mundos lo consiguen Olivier Nakache y Eric Toledano (directores y guionistas) por tres vías fundamentalmente. En primer lugar la interpretación maravillosa de los dos actores protagonistas que marcan perfectamente la polaridad en esta simbiosis. Segundo, la música que va desde la emoción puramente espiritual de Mozart, Bach, Wagner, Vivaldi, Brams y un largo etc. hasta la pasión puramente carnal del funky más excitante de Earth, Wind and Fire. Tercero, el paisaje urbano, social y humano de este Paris del siglo XXI donde una hora de metro supone pasar del paraíso al infierno. Pero el hilo conductor de todo esto y lo que fija por momentos el metabolismo emocional en la película es la maravillosa B.S.O.  a cargo de Ludovico Einaudi.
Al salir de la pelicula no sé por qué pero recordé la escena final de Some Like It Hot (Con faldas y a lo loco) cuando ambas parejas llegan a la conclusión de que su afán es el riesgo de aceptar al otro resumido en la fantástica frase final: …nobody is perfect (nadie es perfecto) convirtiéndola en una de esas cosas que te reconcilian con la vida. La diferencia es que Untouchable no es exclusivamente ficción, está basada en un hechos reales y hasta llegamos a conocer a los protagonistas verdaderos de la historia y eso, eso te reconcilia con el ser humano.
Mi más encarecida recomendación es que la veáis en versión original. El idioma es muy importante en esta película, las inflexiones, las pausas, la contención y la explosión, los tonos, las transiciones son fundamentales en el ritmo narrativo.
Ademas, el francés es un idioma muy bello.


la música:
PHILIPPE










DRISS









B. S. O. LUDOVICO EINAUDI

1 comentario:

Deaire - La trayectoria del cielo dijo...

Me has convencido, Kai, ya lo creo. Procuraré, más que verla, hacerme con ella, si es posible. Hacen falta, hoy más que otras veces, inyecciones como ésta para recuperar un poco de optimismo y fe en la raza humana.
En cuanto al idioma francés, estoy de acuerdo, es uno de los más bellos. Aunque tendría que "engrasar" de nuevo mi oído, pero aquí nos brindas una buena excusa para recuperarlo.
Gracias por la sugerencia.
Un saludo